Fué eso:
Un instante.
Un momento efímero.
Pero realmente me dejó pensando.
Una sensación.
Casi un suspiro.
Pero realmente profundo.
Intravenoso.
Subía las escaleras.
Salía a la noche.
Dejando atrás el día artificial que siempre reina en el subte.
Y mientras comenzaba a vislumbrar la calle.
Y los edificios.
Y el cielo de Budapest.
Pensé:
"Voy a extraniar todo esto cuando me vaya..."
Un instante.
Pero que puede marcar mi futuro, no??
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Te quedaras a vivir en Budapest quiza...
ResponderEliminaro volveras pronto a esa ciudad...
jajajja, parece consejo de galletita de la fortuna! "o volveras pronto a esa ciudad..."
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